

Los conflictos, el clima y la IA harán que la inflación sea más volátil, predice el BCE
El Banco Central Europeo advirtió el lunes de que los nuevos desafíos, que abarcan las tensiones comerciales y geopolíticas, la inteligencia artificial y el cambio climático, podrían hacer que la inflación sea más volátil, lo que justifica una estrategia de política monetaria más flexible.
Estos cambios estructurales apuntan a "mayores desviaciones del objetivo de inflación del 2%" fijado por el BCE, por lo que la institución de la eurozona usará herramientas "de manera flexible (ante) los nuevos impactos", según un comunicado.
La estrategia monetaria inicial del BCE, adoptada en 1998 y revisada en 2003, fue revisada por última vez en 2021 con la introducción de un objetivo de inflación a medio plazo del 2%.
Ante un entorno mundial en rápida evolución, la institución no quiso volver a esperar tanto tiempo para reajustarla.
Según sus conclusiones, todos los instrumentos de política monetaria de que disponen los guardianes del euro -tipos de interés, intervenciones en los mercados de bonos, ya sean indiscriminadas o dirigidas a países concretos, préstamos a largo plazo y condicionados a los bancos, etc.- "permanecerán en su caja de herramientas".
Pero "la elección, la elaboración y la aplicación de estos instrumentos serán suficientemente flexibles para poder responder con holgura a los cambios del entorno de la inflación".
Esta revisión estratégica "nos permite contar con una base aún más firme para dirigir la política monetaria y cumplir nuestra misión de mantener la estabilidad de precios en un entorno cada vez más incierto", declaró la presidenta del BCE, Christine Lagarde, en un comunicado.
El BCE está saliendo de un periodo turbulento, en el que la recuperación económica tras la pandemia del covid-19 y la guerra rusa en Ucrania provocaron un repunte de la inflación, especialmente a través de los precios de la energía y las interrupciones de la cadena de suministro.
La estricta política monetaria aplicada en respuesta permitió volver a situar la inflación en línea con el objetivo del BCE mediante una fuerte subida de las tasas de interés.
A partir de ahora, el Consejo de Gobernadores del BCE, que decide sobre la política monetaria, tendrá en cuenta "no solo la trayectoria más probable de la inflación y la economía, sino también los riesgos e incertidumbres que la rodean", concluye el comunicado.
La primera reunión de aplicación de la nueva estrategia tendrá lugar los días 23 y 24 de julio.
D.Nikolaou--AN-GR